TRAGEDIA ESPAÑOLA

La tragedia española de Thomas Kyd – el más castellano de los dramas isabelinos – se entremezcla con las intrigas y devaneos sexuales que tienen lugar en el palco presidencial de un conocido estadio de fútbol, durante un encuentro entre las selecciones de España y Portugal.

Don Andrés ha muerto en una refriega entre los ejércitos de España y Portugal, y ahora, desde el Averno, clama venganza, mientras el príncipe portugués, Baltasar, prisionero de los españoles, se conjura contra Horacio – amigo de Andrés y vencedor de Baltasar en combate – por lograr el amor de Bel-Imperia – prometida de Andrés y a su muerte, enamorada de Horacio – junto a Lorenzo, hijo de un grande de Castilla y hermano de Bel-Imperia. A traición, Baltasar y Lorenzo asesinan a Horacio cuando se daba cita con Bel-Imperia, al tiempo que ella es encerrada en una torre con la amenaza de no ser liberada hasta que acepte a Baltasar como marido. Jerónimo, padre de Horacio y Justicia del Reino de España, clama venganza y busca la ruina de los asesinos de su hijo, ayudado por Bel-Imperia. Durante una representación teatral, acaban por asesinar a los culpables, para terminar ellos mismos muriendo a su vez. La venganza queda satisfecha. Mientras todo esto sucede, en el palco se entremezcla un crisol de traiciones, conjuras y amenazas en el contexto de los actuales hombres de negocios, políticos y jueces, trasuntos de los antiguos nobles.

La tragedia española de TeatroLAB Madrid, dirigida por Gabriel Olivares y versionada por Ramón Paso, crea un espejo en el que las conspiraciones y las venganzas pasadas se proyectan en las bajezas e inmundicias presentes.