Danza | Contemporánea
13 minutos | Castellano | Todos Públicos
Como en una cosmogonía, al principio hay un rumor que, in crescendo, va inundando espacio y abre la escena; una aparición: un trapecio suspendido y, ante él, una figura solitaria que asciende y se zambulle en el aire.
La combinación de la expresividad de la danza aérea con el fluido sonoro nos transporta a un viaje interior en el que lo que presenta ante nuestros ojos es solamente la parte misteriosa de una naturaleza invisible y esencial; una suerte de trance en el que, a través de la ciclicidad de la voz y el movimiento y su vaivén de presencias, Teresa Magallón toma el espacio sonoro que Gustavo Giménez dispone para ir desplegando, capa a capa, un universo hipnótico y sobrecogedor.
Teresa Magallón y Gustavo Giménez se juntan en la creación de una pieza corta que aúna danza aérea y voz. Tras su paso por “El delator de secretos” Trarutan 2020 y “Espacio Reto” 2020, continúan con el desarrollo de “El peso de aire”.
Su investigación se centra en la combinación de sus disciplinas que navegan entre lo cíclico, lo escondido, el misterio y la conciencia.
Técnicas:
La pieza aúna voz y danza aérea. La voz se suma y mezcla a través de loops, creando ambientes sonoros y texturas. El cuerpo se dispone en el trapecio, se rompe se fragiliza, se tensa y destensa.
El trapecio se trabaja a varias alturas y de forma giratoria permitiendo un sin fin de posibilidades.
Ficha Artística
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