Música | Músicas del mundo
60 minutos | Castellano | Todos Públicos
Al encontrarse Borges con la milonga, solía frasear que esa expresión musical, mirada a fondo y con atención, bastaba por sí misma para conjugar un primario y definitivo elemento cultural del Buenos Aires del siglo veinte. Era su idea de estimarle al tango un valor sustancial en el carácter de los argentinos, y además que esa expresión musical resumía el inconsciente de la cultura bonaerense en general.
Surgido de las mezclas culturales y raciales, el tango evoca el ambiente, el barrio, las calles, los bodegones y cafés, el sentir y la personalidad porteñas. Había dicho Discépolo, en un relámpago que alumbró la esencia de la música de Buenos Aires, que “el tango es un pensamiento triste que se puede bailar”.
En esta amalgama de colores que es el tango -a veces un damero en blaco y negro-, se dibuja el alma del porteño, la nostalgia del emigrante. Como en un trampantojo, al bandoneón se le confiesan las penas (Quejas de Bandoneón, A. Piazzolla), se improvisa tradicionalmente en un duelo (Payadora, J. Plaza) o se respira como en una acuarela el aire de soledad última del individuo perdido en la multitud (Soledad, A. Piazzolla)
Y en este infinito e irremediable caminar en el tiempo (El Andariego, O. Pugliese) bajo la persistente lluvia de Buenos Aires (Garúa, A. Troilo), buceando entre la atmósfera invernal (Invierno Porteño, A. Piazzolla), se esbozan otros sueños, otros recuerdos, otros colores (Marrón y Azul, A. Piazzolla) y se hilvanan con la luz del presente y del futuro (Tango Elegía op. 15 *, C. Bianchini)
*Estrenada en julio de 2022 en el Festival Internacional de Panticosa. Obra dedicada en exclusiva a Iberotango.
Ficha Artística
- Autores:
- Adaptación:
- Traducción:
- Dirección:
- Intérpretes:
- Producción:
- Escenografía:
- Coreografía:
- Vestuario:
- Música: